“SI NO LOGRO CUMPLIR ESTAS TRES COSAS, RENUNCIARÉ DE INMEDIATO.” Luis de la Fuente lanzó una declaración desafiante: estableció tres hitos que podrían cambiar el destino de la selección española en las eliminatorias del Mundial 2026. Pero apenas unas horas después, la respuesta de Lionel Scaloni, seleccionador de Argentina, fue como un golpe directo a las “ambiciones ilusorias” de De la Fuente: “Recuerda aquella noche en Doha, cuando tú y La Roja perdisteis no solo el partido, sino también el honor y el orgullo de España.”

“SI NO LOGRO CUMPLIR ESTAS TRES COSAS, RENUNCIARÉ DE INMEDIATO.”

Luis de la Fuente ha encendido una tormenta mediática en el fútbol internacional con una declaración tan contundente como inusual para un seleccionador nacional. En una rueda de prensa cargada de tensión y expectativa, el técnico de la selección española anunció tres objetivos innegociables que, según él, marcarán el rumbo de La Roja en las eliminatorias rumbo al Mundial de 2026. Y, con un tono firme y decidido, lanzó la frase que resonó en toda Europa: “Si no logro cumplir estas tres cosas, renunciaré de inmediato.”

Aunque no detalló públicamente cada uno de esos hitos, fuentes cercanas a la Federación Española de Fútbol aseguran que se trata de metas específicas: devolver el estilo ofensivo característico de la “España campeona”, consolidar una defensa sólida y alcanzar al menos el primer puesto de su grupo clasificatorio. De la Fuente considera que sin esos logros, su proyecto carecería de sentido. Su mensaje fue claro: la paciencia tiene límites, incluso para él mismo.

Sin embargo, lo que parecía una muestra de autocrítica y compromiso pronto se convirtió en el detonante de una polémica inesperada. Lionel Scaloni, actual entrenador de la selección argentina y campeón del mundo en Catar 2022, no tardó en responder con un tono sarcástico pero contundente. En declaraciones a la prensa argentina, Scaloni afirmó: “Que De la Fuente recuerde aquella noche en Doha, cuando él y La Roja perdieron no solo el partido, sino también el honor y el orgullo de España.”

La referencia directa a la eliminación de España en los octavos de final del Mundial 2022 ante Marruecos no pasó desapercibida. Para muchos, las palabras de Scaloni fueron un recordatorio de la distancia que separa actualmente a las dos selecciones: una, consolidada en la cima del fútbol mundial; la otra, aún en busca de identidad tras años de altibajos.

La respuesta de De la Fuente no se hizo esperar. En una entrevista posterior, el técnico riojano defendió su visión: “No vivo del pasado. Respeto lo que logró Argentina, pero España tiene su propio camino. Nuestra meta no es recordar Doha, sino escribir una nueva historia en Norteamérica.” Sus palabras, aunque diplomáticas, reflejan el orgullo herido de un entrenador bajo presión y el deseo de recuperar la grandeza perdida.

Los analistas deportivos españoles se dividen ante esta confrontación mediática. Algunos consideran que De la Fuente ha demostrado carácter y determinación, enviando un mensaje de liderazgo a sus jugadores. Otros, en cambio, advierten que este tipo de declaraciones solo aumentan la presión sobre un equipo que todavía busca estabilidad. “Cuando un seleccionador promete dimitir si no logra ciertos objetivos, está jugando con fuego”, señaló el exinternacional Fernando Hierro en Cadena SER.

Mientras tanto, el vestuario español parece mantener la calma. Fuentes internas aseguran que los jugadores han cerrado filas en torno a su entrenador, conscientes de que el verdadero examen está en el campo. Con jóvenes talentos como Lamine Yamal, Nico Williams y Pedri encabezando la nueva generación, el reto de revitalizar La Roja es tanto un desafío deportivo como emocional.

A pocos meses del inicio de las eliminatorias, el eco de las palabras de De la Fuente aún resuena. Su promesa puede interpretarse como un acto de valentía o de desesperación, pero lo cierto es que ha devuelto a la selección española al centro del debate futbolístico internacional. En un deporte donde las declaraciones pesan tanto como los resultados, De la Fuente ha apostado todo su crédito en una sola jugada: cumplir sus tres promesas o marcharse por la puerta grande.

Related Posts

Leave a Reply

Your email address will not be published. Required fields are marked *