Barcelona, 6 de octubre de 2025 — El vestuario del FC Barcelona se ha convertido en un polvorín tras su humillante derrota por 4-1 ante el Sevilla en el Ramón Sánchez-Pizjuán, una derrota que no solo le dio al Real Madrid el primer puesto de La Liga, sino que también encendió una crisis que amenaza con consumir el proyecto de Hansi Flick.
El punto de inflexión llegó en el minuto 75, cuando Robert Lewandowski falló un penalti crucial con el Barça perdiendo 2-1 y aún con esperanzas de remontar. Sin embargo, lo que realmente ha conmocionado al club catalán no es el fallo en sí —su tercer penalti fallado desde que llegó en 2022—, sino la explosiva revelación que le siguió.
En una emotiva entrevista exclusiva con TV3 el lunes por la mañana, el delantero de 37 años afirmó que Flick lo confrontó después del pitido final con palabras que lo dejaron “humillado”.
“Sé que cometí un error al fallar el penalti, pero lo que Hansi me dijo después es algo que jamás aceptaré de ningún entrenador”, admitió Lewandowski con la voz entrecortada. “Me dijo: ‘Eres demasiado mayor para este club, Lewy. Ya no aguantas la presión; es hora de retirarte y dar paso a los jóvenes’. Me sentí destrozado, como si 15 años de títulos europeos no significaran nada”.
La confesión de Lewandowski explotó en redes sociales, donde la etiqueta #FlickOut superó el medio millón de menciones en cuestión de horas. Fuentes cercanas al vestuario, anónimas, confirmaron que el enfrentamiento tuvo lugar en el túnel de vestuarios, fuera del alcance de las cámaras, pero al alcance del oído de compañeros como Pedri y Marcus Rashford, quienes habían marcado el único gol del Barcelona al final de la primera parte.
Lewy salió furioso, dando un portazo en su taquilla. Flick lo siguió y pronunció esas palabras, pensando que solo era un momento privado de amor duro, reveló una fuente.
Desde su llegada en el verano de 2024, Flick se ha caracterizado por su inflexibilidad. Tras la derrota, dejó entrever su frustración en la rueda de prensa posterior al partido:
Cometimos graves errores esta noche. No todos están rindiendo al nivel que exige este club. Necesitamos calidad, no excusas.
Pero pocos esperaban que una crítica tan directa se dirigiera al delantero estrella del club, ahora el máximo goleador histórico del Barça con 102 goles en tres temporadas.
Desde el inicio, el partido fue una pesadilla. El Sevilla revitalizado de Matías Almeyda marcó pronto: un penalti polémico contra Ronald Araújo en el minuto 10, transformado con serenidad por el exjugador del Barça Alexis Sánchez, y un potente disparo de Isaac Romero en el 36 para poner el 2-0. Rashford, cedido por el Manchester United y una de las revelaciones de la temporada con cinco goles, recortó distancias en el tiempo añadido con una volea espectacular.
El Barcelona presionó con fuerza tras el descanso, con Flick dando entrada a Alejandro Balde y Eric García para provocar la reacción. Pedri dio en el poste, el cabezazo de García rozó el larguero, pero la fortuna les abandonó. Entonces llegó el momento decisivo en el minuto 75: una falta torpe de Januzaj le dio a Lewandowski la oportunidad de empatar. Su característica carrera lenta lo traicionó: el disparo rozó el poste y la oportunidad se esfumó.
“Fallé por exceso de confianza, lo admito”, dijo Lewandowski después. “Pero las palabras de Flick… me destrozaron”.
El Sevilla se lo hizo pagar al Barça con dos goles en los últimos minutos —Carmona a la contra en el minuto 88 y Adams en el tiempo añadido— para sellar una famosa victoria por 4-1, su primera victoria en casa sobre el Barcelona en el Pizjuán en una década. Flick, visiblemente exasperado, se cubrió la cara cuando el disparo se fue fuera, y luego se limitó a decir:
Lo intentamos todo, pero no encontramos soluciones. Nuestros errores en la construcción del juego nos costaron caro.
Ahora, con el inicio del parón internacional, la tensión en el Camp Nou está a flor de piel. Pedri defendió públicamente a su capitán:
Lewy es nuestro líder y nuestro ejemplo. Nadie está acabado a los 37 años si todavía marca 30 goles por temporada.
El presidente del club, Joan Laporta, ha convocado reuniones de emergencia tras el descenso del equipo al segundo puesto con 19 puntos tras ocho jornadas. Algunos informes sugieren que Flick podría incluso dejar a Lewandowski en la banca para el Clásico de noviembre, mientras que otros insinúan que los clubes saudíes ya han preguntado por un posible traspaso en enero.
La afición está profundamente dividida. Las redes sociales están inundadas de memes del penalti fallado y cánticos exigiendo la dimisión de Flick. Una publicación viral decía:
“Si esto es cierto, Flick debe irse: nadie le falta el respeto a una leyenda como Lewy”.
Por su parte, Lewandowski respondió con un comentario mordaz:
Lo he ganado todo con entrenadores como Guardiola y Nagelsmann. Flick es un buen entrenador, pero el respeto no se negocia. Volveré más fuerte, con o sin él.
La pregunta ahora se cierne sobre el tapete: ¿podrá Flick sobrevivir a esta tormenta, o su Barcelona ya está empezando a desmoronarse? Con un tenso parón por la FIFA y la incertidumbre en el ambiente, una cosa está clara: las palabras de Lewandowski han conmocionado al Camp Nou hasta los cimientos. La afición exige respuestas, no excusas.