Después de una dramática victoria por 4-3 de parte del Inter de Milán el martes por la noche, el club italiano aseguró su lugar en la final de la Liga de Campeones en Múnich, a la espera del resultado entre Arsenal y PSG. Por otro lado, el Barcelona quedó procesando una dolorosa derrota.

Según El Nacional, el entrenador alemán Hansi Flick culpó en gran medida al árbitro polaco Szymon Marciniak, acusándolo de desempeñar un papel importante en la eliminación del Barcelona. Flick cree que el árbitro pasó por alto dos claras oportunidades de penalti a favor del Barça y no pitó una falta que llevó al gol del empate de Inter en el último minuto.

Pero la frustración de Flick no se detuvo en el arbitraje. El informe afirma que criticó severamente a los jóvenes defensores Pau Cubarsí y Gerard Martín por sus malas actuaciones. Cubarsí cometió un penalti crucial, lo que llevó al segundo gol del Inter, mientras que Martín fue responsable de dos de los goles que marcaron en contra del Barcelona.

Además, se dice que Flick estuvo furioso con Ronald Araújo, quien no marcó a Francesco Acerbi en los últimos minutos, permitiendo que Inter empatara y llevara el partido a tiempo extra. El entrenador supuestamente exigió que Araújo fuera retirado del equipo de inmediato y pidió al presidente del club, Joan Laporta, que vendiera al jugador durante la próxima ventana de transferencias.
A pesar de su dura crítica a algunos jugadores, Flick reconoció el esfuerzo de Pedri y Lamine Yamal, elogiando su compromiso e intensidad durante todo el partido. Sin embargo, lamentó que sus actuaciones fueron opacadas por errores defensivos clave y la falta de presencia de Raphinha, aparte de una participación en el tercer gol.
En un movimiento sorprendente, el presidente Laporta entró al vestuario después de la derrota para ofrecer su apoyo. No obstante, parece compartir la opinión de Flick sobre Araújo, ya que supuestamente le dijo al defensor uruguayo que buscara un nuevo club debido a sus repetidos errores costosos.