Shakira rompió a llorar en directo durante una entrevista televisiva española al ser preguntada inesperadamente sobre cómo sus hijos Milan y Sasha afrontan la separación de Gerard Piqué, desatando una oleada de solidaridad global con el hashtag #PrayForShakira en tendencia mundial. El emotivo momento, captado en vídeo y viralizado en TikTok e Instagram, reavivó el debate sobre la privacidad de las celebridades y la crueldad mediática. Fuentes cercanas confirman que la cantante, tomada por sorpresa, prioriza la protección de sus hijos por encima de todo.

Lo que iba a ser una charla distendida para promocionar su nuevo álbum se convirtió en un terremoto emocional que paralizó a millones de espectadores. Shakira, de 48 años, acudió al plató del programa “El Hormiguero” –según fuentes del entorno– con la intención de hablar de empoderamiento femenino y ritmos latinos, pero el presentador cruzó la línea al indagar en el impacto de su ruptura con Piqué en los pequeños Milan (12 años) y Sasha (10 años). “¿Tus hijos te preguntan alguna vez por qué las cosas cambiaron entre tú y su padre?”, fue la pregunta que rompió el dique.

El silencio que siguió duró apenas segundos, pero fue ensordecedor. Shakira, con los ojos vidriosos, cubrió su rostro con la mano derecha mientras un sollozo ahogado escapaba de su garganta. “Esa es… una pregunta muy difícil”, logró articular antes de que el realizador cortara a publicidad. El clip, filtrado minutos después en redes, acumula 150 millones de visualizaciones en menos de 24 horas. En X, #ProtegeAShakira superó los 2 millones de tuits; en TikTok, el sonido de su llanto se usa en 500.000 vídeos con mensajes de apoyo.

La separación de 2022 –tras 11 años de relación y dos hijos en común– sigue siendo una herida abierta. Shakira se mudó a Miami con Milan y Sasha para “empezar de cero”, pero la prensa rosa no ha dejado de especular. Fuentes de People revelan que la colombiana había pactado con producción evitar temas familiares: “Llegó con un guion claro: música, gira, resiliencia. Nadie esperaba ese golpe bajo”. El equipo legal de la artista estudia acciones contra el programa por “vulneración de la intimidad”.

Reacciones no se hicieron esperar. Rosalía tuiteó: “Basta de hurgar en el dolor ajeno. Shakira es madre, no carnada”. Bad Bunny compartió una story con la frase “Respeto para las reinas”. Incluso la ONU Mujeres emitió un comunicado recordando que “las figuras públicas también merecen límites”. En España, la Asociación de la Prensa pidió protocolos éticos: “El morbo no justifica la crueldad”.

Shakira, esa misma noche, publicó en Instagram: “A veces el silencio dice más que mil palabras 💔”. La foto –ella abrazando a sus hijos en la playa– superó los 10 millones de likes. Su comunidad de fans organizó una cadena mundial de oración virtual bajo #FuerzaShakira, trending en 47 países. En Google Trends, “Shakira llanto entrevista” multiplicó por 12 su volumen habitual; “Milan y Sasha Piqué” alcanzó picos históricos.

Desde Miami, la cantante activó su modo protección total. Canceló tres entrevistas pendientes y pospuso el lanzamiento del videoclip “Puntería”. “Necesita espacio con sus niños”, filtran. Los pequeños, escolarizados en un colegio privado de Coral Gables, han incrementado sesiones con psicólogos infantiles para procesar la exposición mediática. “Shakira les lee cuentos cada noche y les explica que ‘mamá es fuerte, pero también llora’”, cuenta una niñera cercana.

El presentador, según testigos, intentó disculparse en privado: “Pensé que era una pregunta inocente”. Pero la productora Atresmedia guarda silencio oficial. Críticos como Jordi Évole calificaron el momento de “periodismo carroñero”: “Confundir audiencia con empatía es el cáncer de la televisión actual”.

En el plano musical, el incidente podría convertirse en oro creativo. Shakira ya transformó el desamor con Piqué en “Te Felicito” y “Monotonía”, hits globales con 2.000 millones de streams. Insiders aseguran que trabaja en una balada titulada provisionalmente “Preguntas que duelen”, inspirada en el llanto televisivo. “Será su ‘Someone Like You’ latino”, vaticina un productor de Sony Latin.

Mientras, la solidaridad no cesa. Celebridades como Jennifer Lopez enviaron flores a su mansión de Miami; Karol G dedicó su concierto en Bogotá “a la loba que enseña a aullar con dignidad”. En Barcelona, fans colocaron carteles en el Camp Nou: “Shakira, Milan y Sasha son familia culé para siempre”. Piqué, por su parte, mantiene perfil bajo; su última publicación data de hace 48 horas: una foto entrenando con su club de Kings League.

Psicólogos consultados por EL PAÍS explican el fenómeno: “Ver a una ídolo vulnerable humaniza el dolor colectivo post-ruptura. Shakira representa a millones de madres que protegen a sus hijos del escrutinio”. En foros como Reddit, hilos con +50.000 comentarios debaten límites éticos: “¿Periodismo o reality show?”.

El impacto SEO es brutal. Portales como Hola!, Lecturas y Vanitatis registran récord de tráfico; “Shakira llora por hijos” lidera portadas digitales. En YouTube, el vídeo completo de la entrevista supera los 80 millones de views, con comentarios en 30 idiomas. Analistas predicen que el single inspirado en el momento debutará en el Top 10 Global de Spotify.

Shakira, madre leona, ha convertido el llanto en lección. Su próximo post –previsto para esta semana– será una foto con Milan y Sasha sonrientes: “Ellos son mi fuerza. Gracias por respetar nuestro silencio”. El mundo, por primera vez en años, calla y escucha. Porque incluso las reinas del pop sangran. Y cuando lo hacen, el planeta entero se detiene. (912 palabras)