La noche del partido entre Villarreal y Real Madrid, que terminó con una victoria polémica de los blancos por 3-2, ha dejado una de las polémicas más encendidas de la temporada. Marcus Rashford, delantero del FC Barcelona, no pudo contener su enfado al ver el gol decisivo de Vinicius Jr. y estalló públicamente con duras declaraciones que han sacudido tanto al entorno blaugrana como al madridista.

Según informaciones del programa El Chiringuito de Jugones, Rashford expresó su indignación justo después del pitido final, en un tono muy crítico hacia el delantero brasileño. “Ese gol fue pura suerte, un rebote sin intención. No hay talento, no hay técnica… sólo suerte. ¡Y encima lo celebran como si fuera una obra de arte!”, habría dicho Rashford frente a varios compañeros en el vestuario del Barça.

El jugador inglés fue más allá al acusar directamente al Real Madrid de beneficiarse constantemente de las decisiones arbitrales. “Siempre es lo mismo. Cuando el partido se complica, aparece el árbitro. Ellos saben jugar sucio, manipulan el ritmo, presionan al juez, y al final todo cae de su lado. Villarreal merecía ganar”, habría afirmado el delantero visiblemente alterado.

Estas palabras se difundieron rápidamente a través de la prensa deportiva española y provocaron un auténtico terremoto mediático. Las redes sociales se incendiaron con miles de comentarios, muchos apoyando la valentía de Rashford por “decir la verdad”, y otros acusándole de “falta de respeto” hacia un club histórico y hacia Vinicius.

No tardó en llegar la respuesta desde el bando blanco. Kylian Mbappé, actual figura del Real Madrid y compañero de Vinicius, publicó un mensaje en X (antiguo Twitter) que fue interpretado como una clara réplica al inglés: “Los que no entienden lo que es el talento… lo llaman suerte.” La frase, breve pero contundente, se viralizó en cuestión de minutos, acumulando cientos de miles de interacciones y desatando una ola de memes y comentarios entre los aficionados.

Dentro del vestuario del FC Barcelona, la situación también generó incomodidad. Fuentes cercanas al club aseguran que Jules Koundé y otros jugadores intentaron calmar a Rashford, pero el delantero estaba “demasiado enfadado” y “no quería escuchar a nadie”. Algunos compañeros incluso temieron que el asunto afectara la concentración del equipo en los próximos compromisos de LaLiga.

Mientras tanto, desde Madrid, Vinicius prefirió no responder directamente, aunque fue visto sonriendo durante el entrenamiento matinal del Real, como si las críticas no le afectaran en absoluto. Sin embargo, su entorno dejó claro a la prensa brasileña que el jugador considera “ridículo” el comentario de Rashford y que “los números hablan por sí solos”.

La polémica llega en un momento tenso de la temporada, cuando Barça y Real compiten no solo por el título liguero sino también por el control de la narrativa mediática. Las declaraciones cruzadas de Rashford y Mbappé han añadido un nuevo capítulo al eterno duelo entre los dos gigantes del fútbol español.

En las redes, los aficionados ya hablan de un “nuevo clásico verbal” que podría trasladarse al terreno de juego en el próximo enfrentamiento directo. Lo que está claro es que, después de esta tormenta mediática, cada mirada, cada gesto y cada palabra entre Rashford, Vinicius y Mbappé será analizada al milímetro. El fuego está encendido… y el fútbol español vuelve a arder.